Powered By Blogger

jueves, 12 de abril de 2012




La vida no tiene que ver con llevar el marcador. No tiene que ver con cuántas personas te telefonean, como tampoco con quien saliste, con quien sales o con quien no has salido.
Tampoco tiene que ver con quien has besado, qué deporte practicas o que muchacho o muchacha te simpatiza.
No tiene que ver con tus zapatos o tu cabello o el color de tu piel o dónde vives o a qué escuela vas.
Incluso no tiene que ver con las calificaciones, el dinero, la ropa... La vida no tiene que ver con cuántos amigos tienes o si estás solo, y tampoco con cuán aceptada eres o no. La vida definitivamente no trata de eso.
La vida tiene que ver con a quién amas y a quién lastimas; cómo te sientes respecto de ti misma; tiene que ver con la confianza, la felicidad y la compasión.
Tiene que ver con que estés ahí cuando tus amigos te necesitan y con que sustituyas el odio interior por amor.
La vida trata de evitar los celos, superar la ignorancia y adquirir confianza en uno mismo.
Tiene que ver con lo que dices y lo que en verdad quieres decir. Tiene que ver con considerar a la gente por lo que es y no por lo que posee; pero, sobre todo, tiene que ver con elegir que tu vida ejerza influencia en la de otra persona de una manera que no habría sido posible sin esa decisión.
Con lo que la vida tiene que ver es con estas elecciones.

















No hay comentarios:

Publicar un comentario